lunes, 9 de noviembre de 2009

Perdiendo los sueños. Desvaríos sin voz ni palabra.

Voy a dejar de ser yo por un instante: seré el viento en las calles. Me acercaré a cada alma perdida en esta noche de lluvia y frío y preguntaré por tu nombre.

Voy a perder mi palabra por momentos. Me limitaré a mirar el vacío que dejas cuando cierras los ojos y el tiempo se para. Y yo que quiero llenarlo todo, cada hueco, de frases más o menos entretejidas, me detendré en la frontera del silencio, a contemplarte.

Ya he negado la existencia de Dios tantas veces que casi nos hemos hecho amigos. Pregúntale tú, que a mi me da la risa, en qué tengo que creer cuando los sueños se van gastando. Ya son en blanco y negro, y a la que me descuide perderán la voz. Sueños mudos en blanco y negro ahora que estamos en crisis. Sueños en los que las palabras se imaginan, en el que las voces son apenas susurros en un rincón de la memoria (si es que la memoria tuviera rincones, que éso está por ver).

Si es que todavía bebiera, pero se me pasaron las ganas. Ya ves, ni para bohemio valgo.

La paz y la palabra pedía Blas de Otero. Yo ya no tengo ni para poemas, y Jose nos dejó en un "tocado y hundido" que llenó de lágrimas mi alma. No tengo ya palabras, y la voz se me fue quebrando con tanto tabaco en ayunas. Y en cuanto a la paz, ayer vi las noticias, y qué quieres que te diga...

No hay nada que salvar de lo mío, y si ya sólo quedan poemas de otros, déjame terminar diciéndote: "y aún así, aún así..."

Escribo
en defensa del reino
del hombre y su justicia. Pido
la paz
y la palabra. He dicho
«silencio»,
«sombra»,
«vacío»
etcétera.
Digo
«del hombre y su justicia»,
«océano pacífico»,
lo que me dejan.
Pido
la paz y la palabra.

Blas de Otero. Pido la paz y la palabra.

2 comentarios:

  1. Cielo, hay épocas en que los sueños son en blanco y negro, mudos como las películas antiguas.
    Pero te aseguro que con el tiempo van cobrando tonalidades diferentes: tal vez sean sepia, un tiempo y luego los colores será nitidos y brillantes.

    Volaras en tus sueños y te reiras del blanco y negro que por otra parte es una combinación muy elegante.

    Un beso lleno de esperanza .

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  2. Yo no voy a pedir ni un segundo para soltar palabra alguna, pues después de lo que nos has contado no hay mucho más que decir... Soy otra de esas cuyos sueños han perdido el color porque perdí la plata necesaria en el último revelado. Seguiré esperando a que mi calma, nuestra paz, llegue pronto. Un besote desde Petardylandia.

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